En la Edad Moderna, a mediados del siglo XV, con la abolición del feudalismo y la consecuente 
libertad  de  los  siervos,  surge  en  la  sociedad  un  liderazgo  que  desarrolla  distintos  métodos  de 
administración agrícola, así como sistemas de manufactura de bienes, como resultado del crecimiento de 
las ciudades. En la medida que los negocios crecían, algunos artesanos comenzaron a contratar ayudantes, 
desarrollándose así los oficios, estructurados por niveles, primero estaba el maestro de los oficios, que 
representaba  la  persona  capacitada  y  dueño  del  negocio,  segundo  los  jornaleros,  también  estaban 
plenamente capacitados y ocupaban el rol de empleados, y, tercero los aprendices que se ejercitaban para 
ser jornaleros. 
También  en  la  Edad  Moderna  ocurre  la  Revolución  Industrial  como  uno  de  los  hitos 
transformadores de la sociedad. Se inició en Inglaterra en el siglo XVIII y se propagó por todo el mundo 
civilizado. Se produjeron innovaciones como la máquina a vapor, la cual contribuyó en el desarrollo de 
transporte y fábricas, también se creó el cinematógrafo y el teléfono, que significaron grandes avances 
para a nivel de entretenimiento y de medio de comunicación, entre otros. 
En la Edad contemporánea (finales del siglo XVIII hasta la actualidad), los adelantos tecnológicos 
han sido abismales, a finales del siglo XX se conoce como la sociedad del conocimiento y la información, 
debido a los hallazgos cuali-cuantitativos en ciencia y tecnología como, las computadoras, el internet, el 
vehículo eléctrico, la inteligencia artificial, la biotecnología, la epigenética, la cura de enfermedades 
crónicas,  entre  otros.  También  se  dice  que  es  una  era  llena  de  complejidad  e  incertidumbre,  la 
interconexión global conlleva a cambios acelerados en todas las áreas de la sociedad, la interdependencia 
de los eventos a nivel mundial, todo esto dificulta la posibilidad de los líderes de todos ámbitos para 
predecir el futuro.  
En esta etapa, a nivel mundial se presentan grandes desafíos, fenómenos como el cambio climático, 
el incremento de la pobreza ha generado una brecha más grande a nivel social, trayendo consigo grandes 
tensiones, conflictos bélicos que no cesan, nuevas enfermedades, como la reciente pandemia del COVID-
19. Todas estas situaciones requieren negociaciones y soluciones consensuadas en las que participen los 
líderes  de  los  diferentes  países  involucrados,  en  todos  sectores  de  la  sociedad:  el  gubernamental, 
empresarial, el sector salud, la sociedad civil, así como, las universidades a través de la formación de 
profesionales en diversas áreas, y, como agentes responsables del desarrollo científico y humanístico.